La sexta sesión de los “Diálogos I2Latam-Mimir Andino: Tendencias y buenas prácticas de la gestión de la investigación y la innovación en Europa y América Latina” se llevó a cabo el 20 de octubre de 2020, bajo la temática «Seguimiento y evaluación del impacto de la I+D+i en las universidades».
La Coordinadora de Relaciones Internacionales de la Asociación Colombiana de Universidades, Luisa Fernanda Villamizar, fue la encargada de dar la bienvenida a los participantes, panelistas y a la moderadora del encuentro, Elizabeth Gamboa, Coordinadora Académica de la misma Asociación, quien agradeció por la invitación, asegurando que el encuentro permitirá realizar mejoras, de manera regional e internacional, a la gestión en torno a la investigación e innovación de las diferentes IES.
Gamboa cedió la palabra al primer panelista del encuentro Libardo José Escobar-Toledo, Profesional de vigilancia científica y tecnológica en la Universidad del Magdalena, quien realizó un análisis de tendencia de investigación científica con relación a alianzas de I+D 2015-2020. Explicó que es un análisis bibliométrico que busca recopilar la información obtenida y procesarla, para posteriormente definir los hallazgos de la investigación.
Escobar comentó que entre los hallazgos del análisis de tendencia se encontró que la mayoría de las alianzas I+D están enfocadas a la generación y transferencia de conocimiento, a la creación de técnicas de colaboración, teniendo como beneficiarios a las PYMES, quienes aprovecharon las alianzas de acuerdo a su capacidad de absorción. Entre las tendencias también encontraron, la importancia del diseño del contrato, lo relacionado a la distribución de ganancias y el fomento de la innovación e innovación abierta.
El segundo invitado fue Ricardo Villegas Tovar, Coordinador de producción Académica y Visibilidad Internacional de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla México, quien se encargó de hablar sobre el futuro de las métricas de la producción científica, anotaciones para el buen delineamiento de las políticas institucionales, asegurando que es necesario identificar las formas para acercarse a esa medición científica, la noción de campos y la noción de espacios.
Para el panel se destinaron tres preguntas que abarcaban el campo institucional, nacional e internacional. La moderadora, Elizabeth Gamboa, dio un contexto desde su experiencia y afirmó que las decisiones de medición que se toman en muchas ocasiones se convierten en incentivos para que los investigadores se dirijan a ejes que la institución ha considerado prioritarios, o para resaltar algunos comportamientos que se quiere crezcan en comparación con otros, teniendo en cuenta que la mayoría de las veces los incentivos se pueden volver perversos, en el sentido que se busca un comportamiento y con ellos se genera otro que no es deseado y que tampoco fue previsto.
La primera pregunta fue: ¿Cuáles creen ustedes que pueden ser los efectos que se han tomado, en relación con la medición, de manera positiva y negativa desde sus instituciones?
Libardo Escobar, representante de Unimagdalena, compartió que desde la institución se han desarrollado gestiones para poder medir los impactos de la I+D, que permiten hacer seguimientos al comportamiento de diversas publicaciones siempre que lo necesiten, esto permite tomar decisiones acordes a la generación de incentivos en la creación de investigaciones que aporten al conocimiento, teniendo en cuenta que en muchas de las ocasiones los temas regionales, en estancias internacionales dejan de lado las producciones de conocimiento que dan un valor agregado a un tema nacional y no van más allá por tratarse de algo de la región.
A su afirmación se sumó la de Ricardo Villegas, quien aseguró que la premiación a la producción científica desde las políticas institucionales, en algunos casos, puede llegar a dar como resultado una proliferación de trabajos que pueden no ser de calidad, pero que aún así están recibiendo esos incentivos sin generar un aporte significativo.
La segunda pregunta fue: ¿Cuáles serían las propuestas, desde su experiencia, que entrarían a ser parte de los caminos que en este caso México y Colombia, podrían tomar para la mediación de la investigación y el desarrollo?
Para Villegas es de suma importancia identificar desde dónde nacen las métricas para conocer quiénes son los diseñadores de aquellas métricas estandarizadas que miden de la misma manera todas las investigaciones y las disciplinas, impidiendo la llegada de nuevos conocimientos. La propuesta de Villegas es encontrar un punto intermedio que permita a los científicos apuntar a lo internacional, sin dejar de lado su contexto social. Escobar se sumó a la propuesta agregando que la flexibilidad no debe significar menos calidad, sino, al contrario, debe permitir conocer la calidad de otro tipo de investigaciones.
Por último, la tercera pregunta fue: ¿cuáles sugerencias darían ustedes a los socios de ambos proyectos, en los que hay entidades gubernamentales, asociaciones y universidades, para que le puedan ofrecer algo efectivamente útil a las instituciones, en relación con la medición de impacto y la innovación?
Escobar sugirió dar el espacio a cada IES de mostrar sus intereses particulares, sin dejar de lado la cooperación, que es el enfoque principal de los proyectos como Erasmus. Villegas, por su parte, sugirió enfocarse también en aquellos esfuerzos particulares que hacen los proyectos locales y regionales mejores, aprovechando las capacidades de todos los científicos.
Recordemos que el evento contó con un total de 56 asistentes de Chile, México, Perú y Colombia y se da gracias a la alianza entre los proyectos I2Latam y Mimir Andino, pertenecientes a Erasmus+, co-financiados por la Unión Europea y coordinados por la Universidad de La Sabana y la Asociación Colombiana de Universidades (ASCUN), respectivamente.